Es cierto que la muerte pone de acuerdo a mucha gente, pero cuando el elogio roza la unanimidad es que hemos perdido a alguien especialmente valioso. En ese caso, lo que corresponde es mantener viva la llama de su recuerdo y de su ejemplo para que sirva de inspiración a otra gente que sigue trabajando por una sociedad mejor, más justa y más humana.
ZEROLO